Chetumal, Quintana Roo, 16 de marzo. – En atención al clamor por mejorar las condiciones de vida de las mujeres, así como para garantizar el respeto de sus derechos laborales, la fracción parlamentaria del PT en el Congreso Local -integrada por Alicia Tapia Montejo y Hugo Alday Nieto- presentó una iniciativa para otorgar un día no laborable con goce de sueldo, en favor de las mujeres y personas menstruantes.
Para entender la problemática, se explica que, la dismenorrea es el dolor durante la menstruación que persiste de entre 4 horas y hasta por 4 días, incluso casi similar a los dolores intensos de un ataque cardíaco, de acuerdo con estudios revelados por la Universidad de Londres, por lo que requiere de asistencia médica y con base en la valoración clínica se clasifica en dismenorrea primaria y secundaria.
De acuerdo con los legisladores petistas, esta problemática repercute significativamente en la salud de las mujeres y personas menstruantes, ya que, además de sufrir dolor intenso y sangrado excesivo, puede indicar problemas reproductivos, así como trastornos como el síndrome del ovario poliquístico y aumentar el riesgo de anemia por deficiencia de hierro, entre otros, también se ha demostrado científicamente que provoca bajo rendimiento laboral y en ocasiones el ausentismo de su centro de trabajo, ocasionando repercusiones personales y económicas significativas.
De acuerdo con datos del Programa Higiene Menstrual del Fondo de las Naciones Unidas un 80.7% de las mujeres y personas menstruantes acude a su trabajo, pero con una productividad menor, el 13.8% se ausentan del trabajo.
Por ello, Alicia Tapia Montejo y Hugo Alday Nieto proponen adicionar el artículo 28 Bis, a la Ley de los Trabajadores al Servicio de los Poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial, de los Ayuntamientos y Organismos Descentralizados del Estado de Quintana Roo para otorgar licencia médica de un día laboral con goce de sueldo al mes, a las personas menstruantes, que justifiquen estar diagnosticadas con dismenorrea primaria o secundaria incapacitante, o que, por otros síntomas ocasionados por el periodo menstrual, no puedan cumplir con sus obligaciones laborales.
La idea es que paulatinamente se elimine el estigma de que la menstruación no es un padecimiento grave y que incluso socave los derechos de mujeres, hombres transgénero y personas no binarias, ya que está íntimamente relacionada con la dignidad humana.