Ciudad de México, 13 de enero. – Integrantes de colectivos feministas protestaron contra la presencia de la Guardia Nacional en las instalaciones del Metro y provocaron daños en torniquetes, lectores electrónicos de tarjetas, taquillas y demás infraestructura en la estación Bellas Artes de la Línea 2.
La manifestación violenta ocurrió alrededor de las 18 horas frente a la presencia de elementos de esa fuerza federal que apenas ayer se incorporaron a reforzar la seguridad de los pasajeros, a petición de la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum.
“Fuera Guardia Nacional del Metro”, decía una manta que una de las manifestantes encapuchadas y vestidas de negro extendió cuando se subió a uno de los torniquetes.
Mientras, otras golpeaban con martillos y demás herramientas los lectores de las tarjetas y los torniquetes y gritaban “Hay que abortar a la Guardia Nacional” y “La Guardia Nacional no me cuida, me cuidan mis amigas”. Una de ellas traía un inmovilizador que emite descargas eléctricas.
Las mujeres dieron paso libre a algunos usuarios, actividad que se conoce como “Metro Popular”, ante la mirada de algunos elementos de la Guardia Nacional que se colocaron atrás de fotógrafos y reporteros.
Poco después llegaron otros uniformados más que se interpusieron entre los torniquetes y las mujeres manifestantes, sin que hubiera contacto entre ellos.
Los ataques a las taquillas, cuyos vidrios fueron rotos, generaron crisis nerviosas en algunas de las vendedoras de boletos.
Antes de entrar a las instalaciones, las manifestantes leyeron un posicionamiento en el Antimonumenta dedicado a las mujeres violentadas. Ahí acusaron que el gobierno de Claudia Sheinbaum “pretende culpar de su mala gestión y dirección a un supuesto sabotaje del Metro, con lo cual justifica la militarización del transporte más utilizado por el pueblo, con la introducción de más de 6 mil militares de la Guardia Nacional”.
Agregaron que las instalaciones están en “situaciones deplorables”, lo que ha ocasionado “cientos de accidentes” con víctimas heridas y muertas, como Yaretzi Hernández, estudiante de la UNAM que perdió la vida en el choque en la Línea 3 el pasado sábado 7.
Horas antes, en estaciones de la Línea 3, otro grupo de estudiantes realizaron manifestaciones pacíficas y con cinta canela anularon los lectores de tarjetas para que los usuarios pasaran sin pagar.
Con información de Revista Proceso