TULUM, Quintana Roo, 22 de febrero.- Cerca de mil 500 personas que estaban en una fiesta de música electrónica, en medio de la selva, rumbo a Cobá, fueron desalojados en un operativo con autoridades policiacas de los tres órdenes de gobierno, como parte de los operativos para evitar factores de riesgo de COVID-19.
Participaron en el operativo, además de la Policía Municipal, Estatal y Guardia Nacional, personal de la Cofepris, Sefiplan, Protección Civil y la Dirección municipal de Fiscalización, quienes procedieron a suspender el evento en este predio selvático, además de clausurar el predio y asegurar equipo de riesgo de COVID-19.
Participaron en el operativo, además de la Policía Municipal, Estatal y Guardia Nacional, personal de la Cofepris, Sefiplan, Protección Civil y la Dirección municipal de Fiscalización, quienes procedieron a suspender el evento en este predio selvático, además de clausurar el predio y asegurar equipo de sonido.
Además, una persona fue detenida por las fuerzas del orden, como presunto responsable de este evento, prohibido por el actual nivel en el semáforo epidemiológico.
Con ello, se quiere dejar atrás la imagen de permisividad que tenía el municipio desde el año pasado, cuando todas estas celebraciones clandestinas eran comunes, a pesar de la prohibición por razones de salud.
Con información de agencias
